Probando la nueva sala

**Onamori Kengo** Dom Mayo 03, 2009 10:56 pm

El recinto donde se colocó esa habitación de entrenamiento especial era realmente amplio y estaba increíblemente bien iluminado. Los suelos de piedra reflejaban un potente brillo que demostraban lo nuevos que eran y las paredes estaban pintadas de un color crema. Dos grandes máquinas descansaban en la estancia: en una podía leerse claramente "Hadou" y en la otra "Bakudou".

El capitán se acercó a la máquina que tenía escrito "Hadou" que, como él sabía, eran las Artes Destructivas. La encendió y un pequeño ruido indicó que el aparato ya estaba operativo. En una pequeña pantallita digital se podía leer:

"Rango=Capitán. Seleccione la intensidad y el ataque"

Onamori puso el dispositivo en intesidad 3 (puede marcarse hasta 10 siendo esto lo máximo) y eligió el Byakurai como ataque. El capitán se alejó unos pasos y se quedó en mitad de la habitación, a unos seis metros de la máquina. Llevaba prendida del cinto su zampakutoh. No la emplearía, tan sólo quería comprobar cuál era la potencia de esa máquina.

El capitán empezó a liberar una gran cantidad de reiatsu y un rayo blanco salió disparado de la máquina en su dirección. Onamori Kengo estiró su brazo y el rayo impactó contra su mano: aguantaba el envite del ataque mientras liberaba reiatsu para frenarlo. Tras unos segundos, la máquina dejó de emitir el Byakuran. El capitán se miró su mano ligeramente sorprendido.

Esto quiere decir que este ataque estaba al 30%, pensó. Estos entrenamientos pueden ser interesantes.

Se acercó a la máquina y la apagó. No era el momento de entrenar: había trabajo que cumplir en su despacho y no quería que se amontonara. Más tarde probaría la máquina, y tenía pensado ponerla al nivel 10.